También recuerdo que, de vez en cuando se me hace más fácil conectarme al Twitter y publico alguna que otra frase, denuncia, idea, noticias, cursos. El enlace con mi perfil en Twitter pueden localizarlo en la columna derecha.
A pesar de que tengo poco tiempo o disponibilidad para conectarme, les invito a enviarme sus historias, consejos, contenidos de cursos y seminarios, al correo mich.namaste@gmail.com y haré lo que sea para publicarlo, es una forma de colaborar. Por favor, nada de cadenas, spam, no puedo leer eso, solo me voy a dedicar a leer lo realmente importante, pues no solo recibo los E-mail, también los reviso minuciosamente, no para castrar, sino, me refiero al trabajo que todo editor debe realizar a un texto de un sitio que maneja un tema tan delicado como el que yo trato aquí.
Todos somos parte del Llamado a la Conciencia Vial, no hay que esperar a que llegue yo y publique algo, o algún ingeniero, fiscal, erudito: cada día con nuestra conducta como ciudadanos, padres, hermanos, amigos, podemos hacer la diferencia, si bien es cierto que se necesita mucho de las autoridades para castigar el crimen vial, también es cierto, que, muchos de los infracciones viales se comenten por personas aparentemente sanas, profesionales, y/o que seguramente en sus trabajos u hogares son tachados de honestos y responsables: “el señor X es muy honrado, no es corrupto y cumple con todas las normas de la empresa, lo recomiendo ampliamente para el cargo”… ajá, pero resulta que el Sr. X, es un prepotente cuando toma el volante, se cree el dueño del camino, le hecha el carro a los demás porque tiene que llegar a tiempo a su oficina, no usa las luces de cruce, y el día menos pensado el Sr. X puede provocar un choque pequeño o fatal, según su nivel de prepotencia al manejar.
La prepotencia no es el único problema de muchos conductores, es una de las tantas malas actitudes de los conductores, se tiene por ejemplo la inseguridad o la inexperiencia de un conductor, pueden ser fatales.
Casos en donde “fulanito” es un gran padre, pero cuando lleva a su hijo al colegio, lo sienta de copiloto y sin el cinturón de seguridad, y por el apuro de dejarlo a tiempo en el colegio se come la flecha- total, es de mañanita- y/o se pasa el semáforo rojo, creyendo que está plenamente justificado por el hecho de evitar que su hijo llegue tarde al colegio… si señor, un gran padre.
Estas conductas que se ven normales, corrientes, inocentes… son los que hacen más tristes y trágicos las muertes en siniestros viales, pues la gente muere de la manera más tonta, absurda, ridícula, irresponsable y totalmente sin necesidad, generando un dolor no solo para los familiares de los fallecidos, sino para quienes son familiares del “culpable” que no tuvo intención de matar o matarse mientras iba hablando por celular mientras manejaba, es lo trágico, pues, no se trata de antisociales que les ha faltado el pan, la comida y la educación lo que los lleva a cometer el crimen, sino que son trabajadores, estudiantes, amas de casas, ¡abuelos! Que van por las calles con sus vehículos, manejándolos como una extensión de su mal o alegre carácter y no se dan cuenta que los carros no son de goma, ni son un puñetazo en la cara, ni genera el mismo daño que una mentada de madre, el mal manejo de un vehículo MATA.
Espero entonces, que todo el que encuentre este blog, se sirva de él, de todo su contenido, transmita, lea, investigue, y/o también haga un poco de empatía con los casos que muy valientemente, los familiares de las victimas han dejado bajo mi responsabilidad mostrar para que se entienda de una vez por todas que, somos altamente responsables de lo que pasa en las vías de nuestros países.
Dios los cuide
Mich Vera.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario